Historia

El Parque Cultural Hacienda La Trinidad se asienta sobre casi 450 años de historia. Sus orígenes se encuentran indisolublemente hermanados con los de Caracas y se remontan a 1568, año siguiente a la constitución de la ciudad. Fue el propio Diego de Losada, fundador de nuestra capital, quien asignó a Alonso Andrea de Ledesma una encomienda sobre terrenos ocupados por indígenas en el Valle del Cacique Baruta. El hato establecido por Ledesma en estas tierras daría comienzo a cuatro siglos de emprendimientos agrarios cuya evolución es fiel reflejo de la historia de Venezuela, de sus modos de producción, de su crecimiento y desarrollo.

Primero fue el trigo; luego, a partir del siglo XVIII, el café y la caña de azúcar; finalmente, a mediados del siglo XX, el tabaco. Las construcciones que hoy sobreviven en estos espacios son testigos de estas etapas: la Casa Auxiliar fue centro de procesamiento y almacenaje de café; la llamada Casa del Trapiche fue construida después 1965 alrededor de los vestigios del trapiche en el cual se extraía el jugo de la caña de azúcar; en los Secaderos se deshidrataban o curaban las hojas del tabaco.

Hacia 1950 cesó, en estos lugares, la actividad agrícola a gran escala. No por ello las tierras que hoy albergan este parque cultural dejaron de testimoniar la historia de nuestra ciudad. La expansión urbana que experimentó Caracas cuando la explotación petrolera comenzó a dar sus frutos encontró, en los terrenos de Baruta, un cauce natural. En pocas décadas, las antiguas haciendas se fueron convirtiendo en modernas urbanizaciones, con la consecuente desaparición de un viejo modo de vida y de una arquitectura a él asociado. La Hacienda La Trinidad no fue una excepción, pero sí fue objeto de una decisión afortunada y única tomada en 1970: la preservación de los 15.000 m2 que albergaban sus principales construcciones y su marco natural como un refugio para la memoria histórica. En 2005, esta disposición sería corroborada cuando el Instituto del Patrimonio Cultural declarase esta propiedad como Bien de Interés Cultural del Municipio de Baruta.

Hoy, el Parque Cultural Hacienda La Trinidad constituye un caso único de preservación responsable de un pasado que interactúa y dialoga con el presente. Sus actuales propietarios, más allá de la conciencia que los llevó a resguardar este patrimonio de la vorágine urbanista, supieron convertirlo en un centro cultural autosustentable, con una oferta de gran variedad y atractivo para la población caraqueña contemporánea. En la Casa Vieja de la Hacienda, la Casa Auxiliar y los Secaderos desarrollan su labor galerías de arte contemporáneo y de fotografía, tiendas de artesanía tradicional y de diseño contemporáneo, una librería, un centro de salud alternativa, un restaurant y un laboratorio dedicado a la investigación sobre el cacao. En sus espacios, así como en los jardines que los circundan, se celebran exposiciones, charlas, conferencias, conversatorios, talleres, recitales y muchas otras actividades culturales. Así mismo, la Casa del Trapiche sirve de residencia y taller a la familia del escultor Cornelis Zitman, quien falleció en enero de 2016.

Naturaleza, arquitectura, historia, salud, arte y gastronomía encuentran aquí un lugar de dinámica convergencia en pro del cultivo del cuerpo y el espíritu. Pues no hay mejor manera de preservar un patrimonio para la futuras generaciones que mantenerlo vivo.