Hacienda La Trinidad Parque Cultural

Las piezas que se muestran no fueron concebidas de modo especial como obras de arte. Estas pinturas y tallas se hicieron para el culto privado, imágenes que se colocaban en un altar casero, donde más de una se quemó parcialmente por la cercanía de las velas.

Encontramos aquí algunas de las advocaciones de la Santísima Virgen, imágenes de la vida de Jesús, y también santos y santas cuyas vidas servían de ejemplo a los fieles y a quienes se les pedía que intercedieran por necesidades especiales o que brindaran protección ante sucesos de la naturaleza.

Las pinturas y tallas, realizadas entre los siglos XVIII y XIX, provienen del occidente y centro de Venezuela, de los centros en donde se desarrolló la actividad artística y artesanal: El Tocuyo, Mérida, la región central (Caracas y poblaciones del centro hasta Calabozo) y Maracaibo. Las pinturas se hicieron sobre madera, salvo algunas pocas hechas sobre latón y una sobre tela; los materiales usados fueron óleo, témpera y pigmentos vegetales. No se conoce la autoría de las pinturas, como tampoco de las tallas, ya que no era costumbre firmar estas piezas. Los autores seguramente fueron “santeros”, nombre popular que recibían aquellos que se dedicaban a pintar imágenes religiosas, pero no eran exclusivamente pintores ni tenían un entrenamiento especializado.

La colección de imaginería colonial de la Universidad Simón Bolívar, una de las colecciones que integra el patrimonio artístico institucional, se mostró por primera vez completa, en 1979, cuando se inauguró la sala que se destinó para alojarla. Las piezas proceden de la colección que formó el anticuario Manuel Herrera y que fueron adquiridas por la Universidad para ir conformando un patrimonio artístico que le permitiera a los estudiantes, al tiempo que se formaban para el futuro, tener contacto con una muestra de lo que fue el pasado de nuestro país.